All

lunes, 23 de diciembre de 2013

El silencio es mi más cruel sentimiento.

No poder vivir cada madrugada en paz, pensando cuantas veces más te voy a amar.
Sin parar de pensar en qué momento lo nuestro fue real.

Alcanzar con las yemas de mis dedos rayos de sol en el cielo.
Alcanzar estrellas con tan solo alzar el vuelo.


Mentiras y más mentiras en mis letras, con tus notas escritas y puestas en ácido, donde tus palabras malintencionadas fueron seguidas por mi escaso descanso.

Miles de besos repartidos por tu dulce cuerpo. Sin descanso, sin temor; con el calor recorriendo cada poro de tu piel, sin darme cuenta de mi estupidez.
Respiraciones agitadas en mitad del enredo de nuestros cuerpos. Sin más palabras, sin más consentimiento. 
No hay necesidad de acelerar el procedimiento.
Disfrutemos del momento. De sentirnos bien, de sentirnos vivos con nosotros mismos. 
No ser capaz de aceptar por mí misma que estoy loca por su silencio.
Por sus besos inexistentes.

Y es que tan solo era un sueño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario